Definición
Nena, eres tan bonita que realmente deberías considerar el convertirte en modelo. Hijo, tu padre y yo pensamos que la idea de convertirte en músico no es práctica y pensamos que deberías obtener un título de cuatro años en algo que te conduzca a una carrera exitosa. O tal vez deberías considerar ir a una escuela de comercio. Hombre, ¿por qué quieres tomar un trabajo tan lejos de casa? Creo que deberías tomar un trabajo un poco más cerca de casa para estar más cerca de tu familia. Sabes que el 95% de las empresas fracasan en los primeros cinco años, creo que deberías pensarlo dos veces antes de comenzar un negocio con esta economía. Tienes dos hijos en la universidad; probablemente no es el momento adecuado para hacer ese tipo de movimiento. Deberías quedarte con tu trabajo de tiempo completo.
Es muy común escuchar estos sentimientos mientras intentamos encontrar nuestra dirección en la vida. En la medida en que usted siga estas voces, el Dr. Henry Cloud dice que “usted terminará siendo no lo que es, sino lo que ellos decidan que usted va a ser. Usted habrá perdido el control de sí mismo” (Cloud, 2008). He visto esta “dirección en la vida” denominada de diferentes maneras: “visión”, “propósito de Dios”, “el llamado de Dios en su vida”, su “ruta”, su “allí”, su “lugar”, su “mejor yo”, su “encontrarse a si mismo”, su “lugar ideal”, su “destino”, su “sitio de riqueza”, el lugar donde usted desarrolla su “más grande potencial” y un sinnúmero de otras cosas. Todas estas ideas tienen la misma connotación: hay un lugar único para usted y encontrar ese lugar lo hará exitoso.
Aunque otros pueden compartir nuestra nacionalidad, raza, sexo, ubicación, pasiones e incluso padres, todos somos diferentes. Todos somos creados por Dios para hacer algo. En este libro, he llamado a ese algo “usted debería”. Es algo que usted debe descubrir, y será el descubrimiento más significativo de su vida. Todos tenemos diferentes visiones implantadas en nuestro interior para llevarnos a lograr la visión única de Dios para nuestras vidas. El hecho de que todos somos diferentes es un testimonio de la grandeza de un Dios que puede hacer miles de millones de personas, todas diferentes, todas únicas, todas con visiones, propósitos y planes diferentes para lograr en la Tierra. Descubrir nuestros “usted debería” y luego manifestarlos nos ayuda a reflejar la gloria del Padre que nos creó y nos puso aquí con un destino específico.
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